martes, junio 15, 2004

Las elecciones europeas

Que sí, que en el PSOE estarán muy contentos porque han ganado, que en el PP lo estarán porque se han acercado mucho, que en IU estarán..., bueno estarán, etc... Pero el resultado de estas elecciones es patético. Y no lo digo por los resultados en sí, sino por el índice de participación. El verdadero vencedor, por mayoría absoluta, es el abstencionismo. Y eso que hizo un día malo que no invitaba a la playa. Pero es que la gente no se molesta en ir a votar, porque ya no cree que merezca la pena. Que populares y socialistas estarán muy contentos con los diputados que han sacado, pero no deberían. Que la auténtica realidad es que la peña no vota porque pasa del tema y pasa de ellos. Que si votó tanta gente en marzo fue por la rabia de los muertos, nada más. Que la tendencia es a la baja. Y que aún bajará mucho más, porque nuestros diputados se lo están ganando a pulso.

En fin, mientras unos bajan (madre con IU), otros suben. El Partido del Cannabis se asienta como tercera fuerza en la localidad murciana de Ojós (donde hace no muchos años venció CiU) quinta en Murcia y octava en España. Que digo yo que, por lo menos, alguna utilidad le sacarán a las papeletas sobrantes.

De Chicho a las "Mama Chicho"

Ha pasado cierto tiempo y hasta unas elecciones desde la última vez que escribí. Y han pasado también muchas cosas que no quería dejar sin comentar.

El PSOE ha vuelto a ganar las elecciones, pero esta vez con muy escasa diferencia. No es de extrañar, porque el caos que se llevan está quemando a mucha gente. Tanto decir que si el PP pasaba de la ONU, que nos traímos a las tropas porque la ONU no iba a presentar una resolución antes del 30 de junio; y luego la resolución se presenta a 8 de junio, cuando nuestras tropas ya están aquí. Tropas que, por cierto, parece ser que fueron el objeto de mofa generalizado entre los soldados de los otros países que, afortunadamente, no emulan la valiente decisión de nuestro gobierno. Pedro Solbes, en Hacienda, se está enfrentando una y otra vez a los disparates que uno y otro ministro va soltando casi parece que sin pensar: empezamos con una ministra de cultura que quería imponer un IVA ilegal, y luego decían de Espe, y las burradas han ido una detrás de otra. Hay muchas más cosas, como el apoyo y la cuasi-condena simultanea a las selecciones nacionales autonómicas y otro montón de disparates más, como las nuevas medidas para fastidiar aún más a los trabajadores autónomos (que para la izquierda parece que no fueran trabajadores porque no tienen sindicato ni patrón), que demuestran que el PSOE no estaba preparado para mandar, pero las cosas fueron como fueron, y en 3 días cambio todo. Gracias, eso sí, a una panda de terroristas que habrán tomado buena nota de lo que deben hacer en otros paises cuando el gobierno de turno no les convenga. En fin. Esperemos que esto sólo sean errores de novato y las cosas se vayan arreglando, porque la cosa no tiene buena pinta.

Pero de todas las cosas que se pueden criticar al nuevo gobierno, creo que el asunto de TVE empieza a ser el más vergonzoso. La eliminación del programa de más éxito de toda la historia de la televisión en España, el mítico 'Un, dos, tres', ha sido absolutamente barriobajera. El señor Chicho Ibáñez se enteró de que le cortaban el programa durante la grabación del que tenía que ser el antepenúltimo programa. Y no se enteró por ninguna comunicación oficial, sino por un carpintero que le dijo que le habían dado órdenes de parar de trabajar en los decorados. Sobre la marcha, cualquiera que haya visto este programa se tuvo que dar cuenta, Chicho tuvo que improvisar. Pasaron a los campeones a la subasta junto a los que se habían clasificado de la manera tradicional, pues de otro modo se hubieran quedado 'colgados'. Dicen que Luis Roderas, el presentador, llegó a llorar. Chicho pidio explicaciones y lo único que le dijeron es que el programa era muy caro. Chicho pidio un programa de despedida, como hace siempre, y se comprometio a pagarlo de su bolsillo. No hubo manera, a pesar de que muchos contratos ya estaban pagados. Esta es la nueva política de TVE. Y, lo más triste, ¿saben quien sustituirá a Chicho el próximo viernes? Ni más ni menos que Valerio Lazarov, el padre de las 'Mama Chicho', que ya tiene preparado un maravilloso programa de variedades.

TVE se está hundiendo. Telecinco ya ha empatado este último mes con TVE1. El share medio empieza a ser tan preocupante en el horario nocturno que las bajas audiencias que decían que tenía el "1,2,3" están incluso por encima de las últimas medias. Incluso las noticias de Antena 3, que se decía que estaba en crisis, superan ya a las de TVE. Y eso que Urdaci era un malvado manipulador. TVE batio su record de peor audiencia en prime-time de los últimos 7 años con el debate a 6 de las elecciones europeas. Programas como "Noche de fiesta" saben desde hace tiempo cuando acaban. Un trato que no ha tenido Chicho. Acusan al programa de escasa audiencia. ¿Qué audiencia quieren que tenga si casi ni lo promocionan? ¡Si le llegaron a meter hasta cuatro cortes de cerca de 15 minutos durante las primeras semanas! ¡Si el propio Chicho quiso cortar con el programa 13 y le dijeron que siguiera!

Chicho ha rechazado ofertas de cadenas privadas durante muchos años. Lleva 40 en TVE. Hace poco le llegaron a otorgar un premio. Así lo tratan ahora. Y eso que, a pesar de todo, con la excusa de un concurso, Chicho ha hecho que muchos niños, jóvenes y adultos hayan leido muchos de los libros que ha promocionado. Y muchos que los leerán, porque guardarán en su memoria el recuerdo de los nombres de las obras y personajes que esta edición del "1, 2, 3". Ha prometido venganza. Parece ser que está negociando con Telecinco para hacer algo parecido a las 'Historias para no dormir' o incluso, llevarse el "1,2,3". Ojalá así sea. Ojalá triunfe, cual Edmundo Dantés, y ponga a cada uno en su lugar. Telecinco ha hecho oro con programas basura, ¿qué no podrá hacer con Chicho?

Por cierto, que hoy se publica que la señora Caffarell, la catedrática que está al cargo de todo esto por designación de Zapatero, ha venido a decir algo así como que las cadenas públicas tienen que ser partidaria del partido que mande porque para eso es el más votado. ¡Me quito el sombrero! ¡Madre la que nos espera!